- No deseches ninguna idea. Apúntala y guárdala. Quizá ahora no sepas como continuar pero seguro que en un momento u otro vuelves a ella para reanudarla (e incluso acabarla).
- No imites. Crea tu propio estilo de escribir. Ya sabes, aquello que hacía Jiménez de escribir Burro, con B, si es grande o vurro, con v, si es pequeño. O lo de Saramago, de no poner casi ningún punto (ni guión), pero utilizar las comas de puntos (y de guiones).
- No pierdas la paciencia. Quizá no sepas como continuar un texto pero...
Pues eso, pero seguro que en algún momento, sin presión, darás con la continuación y sabrás como acabarlo.
- No te preocupes por las ventas (o por el número de lectores). El éxito casi siempre llega con retardo y cuando se adelanta, no te da tiempo ni a disfrutarlo.
- No olvides nunca llevar una libreta y un bolígrafo encima. Nunca se sabe dónde puedes estar cuando te visite la inspiración.
- Confía en ti. Eres muy bueno. Si tú no lo piensas, ¿cómo quieres que algún día lo llegue a pensar otra persona?
- Créetelo. Tienes que llegar a creértelo tanto que puedas llegar a hacer un listado con consejos para ser un buen escritor.